
OTRAS FORMAS DE ALIMENTARSE
OTRAS FORMAS DE ALIMENTARSE
Fuente fundamental de la alimentación humana , la proteína es la molécula en mayor proporción en nuestro cuerpo, y la más utilizada por nuestro organismo para la regeneración de nuestros músculos y tejidos. No es la fuente fundamental de energía para los animales en su vida diaria, pero si imprescindible para renovación diaria de piel , mucosas, músculos y células de la sangre. El aporte deficitario de este nutriente, provoca pérdida de masa muscular, anemias, sangrados de encías, osteoporosis entre otros.
Históricamente la alimentación humana ha venido marcada por cambios importantes en su forma de vida. Inicialmente como paleolítico se basaba en carne, frutas y raíces. Con la revolución agrícola y el asentamiento de pequeños grupos en la era neolítica y su evolución , la diete comenzó a ser más variada incorporando el cereal y la leche animal. Otro gran cambio vino con la era industrial y tecnológica, donde las harinas refinadas, el alcohol, el azúcar y las grasas saturadas copan las estanterías de los supermercados y los armarios de las cocinas occidentales.
Con una población mundial de 7,8 billones de personas en 2021, la capacidad de la tierra para abordar la demanda de proteína del ser humano y los animales que le abastecen, se ve sobrepasada, con el modelo actual de alimentación. En la actualidad varios proyectos de investigación de origen español y apoyados por la UE y la OMS, centran sus estudios en la obtención de proteína de calidad de medios alternativos, como son los insectos, las algas y el grano integral. Aunque en nuestra cultura es un concepto novedoso y un tanto escrupuloso, en los países asiáticos, africanos y américa latina más de 2.000.000 de personas se alimentan de manera regular con una o más de las 1.900 especies de insectos comestibles. La característica fundamental de los insectos es su alto valor proteico aportando entre 40 – 50 gramos de proteína por cada 100 gr. de insecto, en comparación con otros alimentos como puede ser la carne 16-22gr de proteína/ 100 gr, el pescado 18-20gr de proteína/100gr o el huevo 12-15 gr de proteína/100gr.
Las algas por su parte, aportan minerales como el hierro, calcio, magnesio, potasio, yodo, así como un gran aporte de proteína vegetal e hidratos, hasta 58gr de proteína/ 100gr , en el caso de la espirulina. Supone una fuente de proteína vegetal limpia ya que solo crecen en ambientes puros y sin contaminación.
Así, el grano integral aporta 13gr de proteína/ 100gr. además de ácido fólico, hierro, calcio, vitamina B y magnesio con un bajo índice glucémico, lo que mejora el sistema cardiovascular, y reduce el riesgo de sobrepeso, diabetes tipo 2, cáncer y otras patologías, asociadas a las harinas refinadas.
Actualmente, los estudios de nuevas fuentes de proteínas buscan formas alternativas de alimentación con los objetivos de:
- aportar la cantidad óptima de proteínas a grupos con necesidades especiales, deportistas, mujeres embarazadas, niños, grupos con intolerancias alimentarias.
- favorecer la sostenibilidad del planeta con explotaciones racionales de la tierra, con menores emisiones de Co2 a la atmósfera y un uso adecuado del agua.
- favorecer la economía circular, con el aprovechamiento de todos los elementos, para alimentación, abonos, piensos, etc.
La UE, regulo el 01/01/2018 con el Reglamento UE2015/2283 del Parlamento Europeo, los insectos (enteros o por partes) como nueva categoría de alimento. Actualmente en España hay varias empresas de alimentación produciendo harinas y piensos con base de insectos, su comercialización actual viene a través de alimentación para deportistas como son barritas proteicas o harinas . Las nuevas formas de alimentación son una realidad a las que se puede acceder de manera fácil y segura.